La importancia de las cejas

Publicado el 18/01/2016

La importancia de las cejas

Las cejas no sólo poseen la función de enmarcar los ojos sino que resaltan nuestra belleza y potencian nuestra mirada. Finas, gruesas, largas, cortas, redondeadas o quebradas pueden modificar la expresión. Lo más importante es que guarden armonía con las facciones del rostro sin que tengan que seguir de forma radical la moda de la época.


Cómo mejorar su forma

Existen distintas técnicas que podemos utilizar para mejorarlas. Una de ellas es a través de la depilación con pinza, pelo por pelo. Si se encuentran canas o pelos largos, no sacarlos, se pueden teñir o cortar. En estos dos casos se tiende a cometer errores, ya que un pelo mal sacado no se recupera, por lo menos rápidamente. Antes de sacarlo hay que saber previamente el formato de la ceja que queremos lograr y tener en cuenta que, la mayoría de las veces las cejas son diferentes entre sí, por lo que es conveniente ir depilando en forma simultánea.

En el caso de que no se tenga pelo, se necesite rellenarla o acentuarla, otra técnica es a través del maquillaje con un lápiz delineador especial para cejas o una sombra opaca del mismo color del pelo. Si se tuvieran canas o se quisiera realzar el color, también se pueden teñir con tintura especial para el área del ojo.

Si se encontraran remolinos o el pelo tuviera distintas direcciones, podemos utilizar la técnica de alisado de cejas con el tratamiento de permanente de pestañas para modificar la dirección del pelo. 

Las cejas son mucho más que el complemento de una mirada y merecen cuidados al igual que el resto del cuerpo. Para su tratamiento, peinarlas con un peine y colocarles el Gel fortalecedor de la línea Antology Internacional. Esto hace que puedan mantener su forma siempre prolija, que sean más fuertes y que la mirada se vuelva más atractiva.

 

Cómo comenzar a diseñar una ceja

Con cualquiera de las técnicas que utilicemos, siempre debemos tener en cuenta el formato: quebradas, finas, largas, etcétera, de acuerdo con el tipo de rostro y la personalidad. Para eso debemos considerar tres puntos: inicio, altura y final.

 

El diseño podemos realizarlo a mano alzada o a través de un esténcil (molde que nos sirve de guía). Este último brinda más seguridad, ya que previamente se puede ver cómo van a quedar antes de comenzar la depilación. También da precisión, definición, simetría, minimiza errores y garantiza la satisfacción del cliente.

El esténcil no sólo es para un maquillaje social, también podemos utilizarlo en:

  • fotografías donde se ven todos los detalles
  • teatro, ya que las cejas dan el carácter y la expresividad del personaje
  • trabajos de dermopigmentación (maquillaje permanente), donde no se deben cometer errores
  • personas que están en tratamiento de quimioterapia, que le facilitan el poder maquillar su cejas sin la necesidad de un profesional.

 

¿Cómo utilizamos el esténcil?

Para depilarlas:

1- Limpiar las cejas y el contorno de las mismas.

2- Retirar el esténcil del cartón y eliminar el pegamento, colocarlo sobre una ceja de forma que el lado superior quede horizontal.

3- Tomar el cepillo de cejas y cepillarlas en toda su extensión con movimientos hacia arriba y hacia afuera.

4- Con un lápiz claro pintar la ceja expuesta de punta a punta del esténcil.

5- Retirar el esténcil y realizar los mismos pasos con la otra ceja, asegurándose de que quede a la misma altura.

6- Todo lo que pintamos es lo que quedará para darle la forma a la ceja; el resto se elimina con la depilación.

7- Por último, retirar el maquillaje.

Para maquillarlas:

1- Repetir los pasos 1, 2 y 3.

2- Elegir un color lo más parecido al tono de las cejas.

3- Aplicar el maquillaje con un pincel, cubriendo la superficie de pelo y de piel.

4- Quitar el esténcil y si se nota que quedó muy cargada, retirar el excedente con un hisopo.

5- Si se quisiera dar volumen a las cejas, colocar una sombra clara debajo de las mismas.

 

El formato de la ceja según el rostro

No olvidemos que las cejas no sólo se relacionan con el rostro, sino que también son el marco de los ojos. Podemos cometer muchos errores que pueden perjudicar y no beneficiar a la clienta. Acentuar mucho el color le puede hacer rasgos muy duros, y muy claras, pueden parecer inexpresivas. Darle una forma que no es correcta puede marcar más la caída del ojo o que tenga un aspecto triste. Demasiado rectas son poco favorables. Muy redondeadas hacen una mirada siempre sorprendida. A la hora de darle el formato a las cejas debemos tener en cuenta los siguientes puntos:

Si nuestra clienta tiene los ojos muy separados, el delinear las cejas levemente más juntas de lo normal puede crear la ilusión de acercar los ojos entre sí.

Si nuestra clienta tiene los ojos muy juntos, el delinear las cejas levemente más separadas de lo normal puede crear la ilusión de separar los ojos entre sí.

Si nuestra clienta tiene los ojos caídos, el delinear las cejas con un leve ángulo en su extremo externo puede crear la ilusión de levantar los ojos.

Si nuestra clienta tiene una forma de cara alargada, el delinear las cejas con una forma curva, sin tanto ángulo, puede suavizar las facciones y crear la ilusión de una cara más redondeada, además de las correcciones que se pueden hacer en pómulos, mentón, mandíbula, frente, etc.

Si nuestra clienta tiene una forma de cara redonda, el delinear las cejas con una forma más angulosa puede balancear las facciones y crear la ilusión de una cara menos redonda además de las correcciones que se pueden hacer en pómulos, mandíbula, sienes, etc.

Las cejas en los hombres.

A la hora de depilar una cara masculina es muy importante tener en cuenta que no se debe de feminizar. La cara del hombre no es la de la mujer y no hay que tender a imitar el arco de la ceja femenina. Por lo tanto, es muy básico que éste tenga una pronunciación mucho menos brusca que en las cejas de las mujeres. En el caso de los hombres se deben eliminar los entrecejos demasiado poblados. Cuando se trata de cejas muy espesas, es preferible hacerlo poco a poco eliminando cada semana una línea de pelo más que en la anterior.

 

Las cejas a través del tiempo

Las cejas han tenido diversos estilos a través del tiempo:

Décadas del '30 y '40: las mujeres tendían a imitar a las estrellas de Hollywood depilando sus cejas con la misma forma delgada que Bette Davis, Marlene Dietrich y Mae West.

Década del '50: las cejas se usaban gruesas y oscuras, angulosas, sin formas redondeadas, como las que popularizó Sophía Loren, Elizabeth Taylor, Ingrid Bergman, Audrey Hepburn y Marilyn Monroe.

Década del '60: las cejas se usaban más finitas, con formas redondeadas. Muchas mujeres depilaban completamente las cejas y las delineaban con un lápiz. 

Década del '70 y '80: se usaban las cejas gruesas, oscuras, bien pobladas, peinadas hacia arriba.

En los '90 y la actualidad: la moda es una ceja ni tan delgada como en los '30 ni tan gruesa como en los '50. Es un punto intermedio entre las dos tendencias. El color se usa lo más parecido al tono del cabello. Por su forma, se busca un ángulo pronunciado hacia la mitad externa de la ceja.

En cualquier caso, tampoco se ha vuelto a la época dorada de los ochenta, cuando Madonna o Marta Sánchez las usaban con un arco muy poblado y las llevaban despeinadas. Hoy se usan voluptuosas, bien definidas, naturales y equilibradas en su separación. Ni demasiado largas, ni excesivamente cortas.  El estilo de las cejas debe reflejar la personalidad de cada uno y ayudar a definir las mejores facciones de un rostro ya que las modas van y vienen pero las facciones no cambian.

Dentro de la tendencia actual de llevar unas cejas naturales, las famosas optan por diferentes estilos según su tipo de rostro.

Cejas delgadas: Aunque no sientan bien a todo el mundo son una de las más demandadas. Llevan ese estilo Charlize Theron o Liv Tyler.

Cejas espesas: Imitan en cierta medida las cejas de los '80 pero más definidas y no tan salvajes. Es el estilo de Brooke Shields que marcó tendencia durante muchos años.

Cejas redondas: Son aconsejadas para los rostros cuadrados ya que suavizan los rasgos de la cara. Las llevan famosas como Sharon Stone, Gwyneth Paltrow y Julia Roberts.

Cejas rectas: Son aconsejables en el caso de las caras alargadas pues ensanchan los rasgos y los hacen más ovalados. Es el caso de la modelo Helena Christensen.

Cejas semi curvas: Este estilo es considerado perfecto para la mayoría de las caras, salvo las muy alargadas. Sandra Bullock y Salma Hayek llevan este tipo de cejas.

Cejas de pico: Con este estilo las caras redondas consiguen unos rasgos más afilados. Éste es el estilo de Cameron Díaz y Demi Moore.

Cejas con pico redondo: El pico de la ceja es más suave, no tan pronunciado y son perfectas para los rostros ovalados. Es el estilo de la modelo Tyra Banks.